Tras ocho horas en el cargo, Édgar Taboada fue removido del puesto, porque permitió que el ataúd de Osvaldo Villalba ingrese al penal de mujeres. Familiares de secuestrados se indignaron por ello.

Una verdadera tormenta política se desató ayer, en horas de la tarde, en torno al sepelio del abatido líder del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) Óscar Villalba, la presión ejercida por su hermana Carmen Villalba desde su lugar de reclusión y las dudas del Gobierno que finalmente se decantó por sustituir al flamante titular de Justicia.

El presidente de la República, Mario Abdo Benítez, decidió destituir a Édgar Taboada Insfrán, tras ocho horas de haber asumido como ministro de Justicia, a raíz del polémico ingreso del ataúd de Osvaldo Villalba al penal del Buen Pastor. Además, fue destituida la directora de la prisión.

El jefe de Gabinete de la Presidencia de la República, Hernán Huttemann, confirmó a Telefuturo que la destitución de Édgar Taboada se basa en la decisión asumida por el ahora ex ministro de permitir el ingreso del féretro de Osvaldo Villalba al penal, cediendo ante la presión de Carmen Villalba, fundadora del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) y hermana del fallecido.

Huttemann señaló en ese sentido que se podría haber debatido el eventual permiso para que Carmen Villalba salga del recinto para despedir a su hermano. Se trata de una situación tan compleja como el ingreso al penal de mujeres y aun así se permitió, indicó.

De igual manera manifestó que el ingreso generaría un precedente, en la cual se da una preferencia ante una supuesta amenaza de amotinamiento por parte de una reclusa.

«La decisión se tomó y ya se está trabajando en el decreto en el que se acepta la renuncia y se designa un encargado de despacho», detalló, a la vez de mencionar que el propio presidente de la República pidió la dimisión del cargo a Édgar Taboada.

Como encargado del despacho de Justicia queda el actual viceministro de Política Criminal, Daniel Benítez, según lo anunciado por Huttemann.

Fiasco. El Gobierno había anunciado que Carmen Villalba iba a ser trasladada del Buen Pastor, hecho que hasta el cierre de la edición no ocurrió.

El comisario Éver París, jefe de la Agrupación Especializada, mencionó que iban a realizar el traslado de Carmen. “Ella manifestó que va a permanecer de manera tranquila en el interior de su celda, por lo que se suspende su traslado”, relató.

Indignación de Tiki Cubas. El primo de Cecilia Cubas, Emilio Tiki Cubas, señaló en su Twitter: “Cuando Osvaldo Villalba en la noche del 24/12/04 asesinaba a Cecilia Cubas con Magna Meza y Cristaldo Miéres, NO dio oportunidad a sus padres ni hermana a que se despidan. Muy mal. Lo que empieza mal, termina peor. Los cargos importantes no son para cagones”.

Familiares

Madre de Edelio está “con mucha rabia”

Obdulia Florenciano, madre del suboficial secuestrado Edelio Morínigo, manifestó su disgusto ante el hecho de permitir el ingreso del ataúd de Osvaldo Villalba, cabecilla del EPP, al penal del Buen Pastor.

“Estoy con mucha rabia. Están privilegiando a los asesinos, a los bandidos. ¿Dónde están los derechos de Edelio, don Óscar Denis y de don Félix Urbieta?”, expresó doña Obdulia, quien no podía ocultar su molestia por lo ocurrido.

“Murió la razón, el sentido común”

Liliana Urbieta, hija de Félix Urbieta, secuestrado en el año 2016, señaló que ayer murió la razón, el sentido común, el deseo de hacer bien las cosas y de buscar la paz, “pero que ya venía agonizando hace años, cuando ya no sabíamos cómo sociedad distinguir los valores que debían adornar a las clases sociales y cuando los niños comenzaron a querer ser narcos y las niñas a dejar de querer ser princesas para convertirse en muñecas de la mafia y del crimen organizado”.

“Terroristas tienen más derechos que secuestrados”

En medio de los desaciertos del Gobierno que, presionado por una mujer que cumple una pena de 17 años de cárcel, demostró ayer su falta total de rumbo, creció la indignación de los familiares de los secuestrados por miembros del EPP.

“Este país da para cualquier cosa, es un circo”, manifestó a Monumental 1080 AM Beatriz Denis, hija del ex vicepresidente de la República, Óscar Denis, quien permanece secuestrado por más de dos años en manos del grupo criminal del Norte.

La mujer prosiguió señalando que “los criminales y los terroristas tienen más derechos que los secuestrados”, en referencia a la falta total de noticias sobre su padre, y los otros dos secuestrados (Edelio Morínigo y Félix Urbieta), pese a los numerosos ruegos realizados a sus captores.

“No sabemos dónde están nuestros familiares. Esto es un circo, más que indignadas (estamos por esta situación). A ella (Carmen Villalba) le pedimos que nos reciba, que nos diga algo de papá”, prosiguió la vocera de los Denis.

Finalmente lamentó que “esto ya es el colmo».

PEDIDO REITERATIVO. En reiteradas ocasiones los familiares de Denis pidieron respuestas a Carmen Villalba y solicitaron reunirse con ella, a fin de acabar con el calvario que vienen viviendo desde el 9 de setiembre del 2020.

Sin embargo, no tienen noticias del ex vice mandatario, pese a que cumplieron con las exigencias de sus captores.

Cuestionamiento al comunicado de la Codehupy

Un comunicado emitido por la Coordinadora de Derechos del Paraguay (Codehupy) causó malestar en la Asociación de Víctimas de Secuestro. En el texto, que fue difundido a través de las redes sociales, mencionaba que “dos indígenas, así como dos presuntos miembros del grupo criminal EPP, fueron asesinados” y esta afirmación no fue bien recibida por los familiares. “Me siento agraviado, porque Codehupy le pone a las víctimas y a familiares en la misma altura que del grupo criminal”, manifestó Fidel Zavala, uno de los miembros de la asociación. Para Zavala, el comunicado contiene un sesgo ideológico y pidió reconozca que la subsistencia del EPP representa un riesgo para la seguridad nacional. “Estas pobres víctimas fueron torturadas y asesinadas frente a sus familiares, pero resulta ser que fueron asesinados los terroristas y también los indígenas”, se quejó.

Exigen lo que niegan a sus víctimas

Escenas que rayan el surrealismo se dieron ayer en el Cementerio de la Recoleta y la principal penitenciaría de mujeres en Asunción, adyacente al mencionado camposanto.

El féretro del extinto líder del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), Osvaldo Villalba, ya estaba por ser exhumado, en horas de la tarde, cuando los familiares deciden llevarlo frente al Buen Pastor, presionando para que se permita el ingreso del ataúd, exigiendo un derecho que ellos (el EPP) niegan a sus víctimas y familiares que piden encarecidamente datos de los secuestrados Edelio Morínigo, Félix Urbieta y Óscar Denis.

Pedían que su hermana Carmen Villalba, recluida en el lugar, pudiera darle el último adiós. Carmen cumple una pena de 17 años por intento de homicidio del comisario Merardo Palacios. Antes cumplió una condena de 18 años por el secuestro de María Edith Bordón de Debernardi.

El hecho derivó en la sustitución del flamante ministro de Justicia Édgar Taboada (ver material adjunto) y de la directora del Buen Pastor, Marian Vázquez.

Confusión. Primeramente, el permiso para el ingreso del féretro fue denegado, porque los familiares se habrían plantado en el sitio sin tener autorización. Luego fue concedida la autorización para que el féretro ingrese por cinco minutos al lugar de reclusión.

Trascendió que Carmen, recluida en un sector de máxima seguridad, exigió la entrada del cuerpo de su hermano hasta el centro penitenciario.

Las autoridades no dieron a conocer el motivo de la autorización, pero se habría hecho para evitar que la mujer impulse un amotinamiento en el lugar.

De esa manera, el féretro estuvo unos minutos en la celda de Carmen, luego de un gran desorden que produjo un atascamiento del intenso tráfico vehicular en la zona, para más tarde proceder al entierro del líder del irregular grupo armado que fue abatido el domingo pasado, en medio de un enfrentamiento con efectivos de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC), y tras el asesinato de dos indígenas, en la zona de Cerro Guazú, Departamento de Amambay.

IDENTIFICADO. Por otra parte, los fiscales que investigan el enfrentamiento que se dio en el Norte confirmaron la identidad del supuesto miembro de la banda criminal que fue abatido en la zona de Cerro Guazú.

Se trata de Edison Gauto, un adolescente de 17 años, que según datos manejados por los investigadores pasó a formar parte del grupo armado hace un tiempo.

Su padre, un líder de la comunidad Yvy Poñy, llegó hasta Asunción para el reconocimiento del cuerpo, explicaron los intervinientes.

Otro Villalba, buscado por la Justicia, obtuvo refugio en Argentina.

La Gremial de Abogados de la Argentina informó a través de sus redes sociales que José Mariano Villalba Ayala, catalogado como parte del brazo logístico del grupo armado que opera en el Norte, y buscado por la Justicia paraguaya, obtuvo “refugio político” del Gobierno argentino.

“Logramos el último refugio político en la familia Villalba, perseguida con ensañamiento por el Estado genocida paraguayo”, señala parte de un comunicado que dieron a conocer, a través de las redes sociales. El texto iba acompañado de una fotografía de José mostrando un documento que respalda su condición de refugiado.

Su hermana, Myriam, también tiene el estatus de refugiada en el vecino país.

José Villalba es considerado en la Justicia paraguaya como el primer jefe de logística que tuvo el Ejército del Pueblo Paraguayo.

Fue imputado por el secuestro del ganadero Luis Lindstron ocurrido en el 2008.

En el año 2010, el hombre fue detenido y procesado por este hecho.

Sin embargo, el 28 de junio de 2011, Villalba fue uno de los 14 imputados que fueron liberados por el entonces juez Gustavo Bonzi en una audiencia preliminar. Luego, el juez fue destituido y su fallo revocado; sin embargo, ya no se volvió a saber del paradero de Villalba. Se realizaron varias incursiones en su búsqueda.

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