Un 27 de julio pero de 1979, hace ya 44 años, Olimpia inscribía su nombre por primera vez entre los ganadores de la codiciada Copa Libertadores de América al prevalecer ante el Boca Juniors en la mítica Bombonera.

ODD Y EL PROYECTO

Todo comenzó en 1976 con la llegada de Osvaldo Domínguez Dibb (ODD) a la presidencia del club.

‘El Tigre’, obsesionado con dar el salto de calidad al fútbol paraguayo, contrató dos años más tarde al recordado Luis Alberto Cubilla, el mismo que 19 años atrás, en 1960, hizo el gol con el que Peñarol le arrebataba al franjeado la primera edición del torneo continental, entonces denominada Copa de Campeones de América.

Cubilla aclaró de entrada que llegaba para romper el molde, nadie le creyó. Planificó con Domínguez las contrataciones y, luego un esporádico fracaso, se lanzó a la conquista del trono sudamericano con jugadores como Alicio Solalinde, Miguel Ángel Piazza, Ever Hugo Almeida, Alberto Kiese, Evaristo Isasi y Hugo Ricardo Talavera.

EL CAMPANAZO

Olimpia se perfiló de entrada. Ganó su grupo, sorteó las semifinales y se metió en una inédita final para encontrarse con el -por entonces- bicampeón, Boca Juniors.

En el primer partido, disputado el 22 de julio, la escuadra franjeada se impuso por 2-0 con goles de Osvaldo Aquino y Osvaldo Piazza.

La vuelta se jugaba una semana después en la famosa Bombonera. Mucho se habló sobre los días previos, el traslado y la estadía de los paraguayos en Buenos Aires. El propio ODD reconoció que su par Xeneize, el ‘Puma’ Alberto José Armando, intentó sobornarlo con USD 40 mil, para forzar una tercera final en Montevideo. 

ODD desistió con elegancia de la “oferta” alegando que el Paraguay precisaba de “glorias deportivas”.

65.000 almas se agolparon al recinto xeneize. Tras 90 minutos para el infarto, más dos expulsados y con un Almeida que no dejó pasar ni el viento, el pitazo final del uruguayo Juan Daniel Cardellino decretaba la hazaña olimpista.

LA GLORIA

El Decano del fútbol paraguayo se convirtió en el primer equipo no brasileño, uruguayo o argentino en ganar el certamen más prestigioso del continente. Luego le tocaría el turno a los colombianos (Atlético Nacional-1989), chilenos (Colo Colo-1991) y ecuatorianos (Liga de Quito-2008).

El éxito del 79 marcó el preludio de un largo romance con las conquistas internacionales (8). Más tarde, en marzo de 1980, Olimpia derrotó al sueco Malmö y se hizo campeón intercontinental. El resto es historia conocida.